domingo, 28 de febrero de 2016

A todos aquellos superando un desamor

A todos aquellos superando un desamor:

Hola, ¿qué tal? ¿Estáis pensando en esa persona? Lo imaginaba. Y es que llegas a ese punto en el que no sabes si no te lo puedes sacar de la cabeza por amor o por costumbre. ¿Y si te has acostumbrado a quererle? Eso si que da miedo, la posibilidad de no encontrar nada más interesante en lo que pensar.


Pero todo, afortunadamente en algunos casaos, tiene su fin. Llega un día en el que la obsesión compulsiva por revivir momentos o por pensar en todos los "y sis..." absurdos que pudieron suceder se acaba. Ese día admites que formó parte de tu vida, sí, pero que también tienes derecho a que no  sea un fantasma presente a lo largo de todo el camino. Al fin y al cabo si él te acompaña a ti pero tu no existes para él no merece la pena.


Abres los ojos y te das cuenta de que puede que exista otra persona ahí fuera que te puede hacer más feliz. O que la soledad elegida es más disfrutable que la añoranza constante. Pero todo esto llega cuando te cansas de aferrarte a algo que ya no está. Cuando te ríes de todo el tiempo que has malgastado dando forma a un recuerdo.


....

domingo, 14 de febrero de 2016

Ahora es demasiado tarde princesa

  Te habría seguido hasta el fin del mundo. Me habías hecho adicto a tu presencia, a esos nervios que me invadían cada vez que me mirabas. Mi objetivo era disfrutar de ti y sabes bien la de historias que me inventé para que nuestros encuentros pareciesen fortuitos.


  Me volvía loco tu sonrisa y la manera en que te movías. Esa inocencia que podías convertir en picardía si te apetecía jugar con las ganas que tenía de ti. Ahora ya nunca te diré lo que echo de menos el olor de tu cuello. Y es que no sabes la de cosas que me faltaron por decirte, ¿habría cambiado algo si lo hubiera hecho?


  Quisiera volver a sentir todo lo que me provocabas... ¿Y si no es demasiado tarde, princesa?

......

domingo, 7 de febrero de 2016

Demasiadas realidades como para quedarse solo en una.

  Y es que a todos, alguna vez, alguien ha intentado mentirnos al decirnos: "¡Déjate de tonterías, aterriza, pon los pies en el suelo! Solo podemos vivir aquello que nos permiten nuestras circunstancias." 


  Espero que no le halláis escuchado, que halláis callado sus palabras afirmando que la imaginación nos acompaña desde que nacemos hasta que la madurez, mal entendida, la destierra de nuestras vidas. Que le halláis gritado que lamentas que crea que la realidad es solo aquello que se deja tocar.


  Y que le halláis compadecido porque nunca podrá sentir un libro, conmoverse con una película o respirar el aire de una historia. Ahora, sonreíd. El niño que lleváis dentro sigue con ganas de explorar otros mundos y, el adulto en el que os habéis convertido, tiene ganas de comprenderlos.


....

jueves, 28 de enero de 2016

Dame la mano, nos vamos al pasado

  ¿Qué harías si existiese la posibilidad de viajar al pasado? Yo lo tengo bastante claro: me dedicaría a observar a la gente. Me da igual que sea en una taberna del medievo o en las calles del Nueva York de los 50. Solo quiero comprobar una cosa.


  Y es si el tiempo nos ha enseñado algo o esas personas también lloran cuando les rompen el corazón o si comparten sonrisas de complicidad con sus amigos o si también está feo revelar secretos ajenos.  ¿Hemos cambiado o en el fondo seguimos siendo los mismos?


  Me reconfortaría ver que hace cientos de años, ellos también podían sentirse solos rodeados de gente, que también vivían cosas que les encantaría borrar y que la vida les parecía demasiado corta. Me gustaría saber si entre ellos y yo solo existe la barrera del tiempo y que me dijeran que sentirse incomprendido no es un invento del futuro


.......

martes, 26 de enero de 2016

Eso no es la vida, es una imagen.

  Hacer fotos y publicarlas en las redes sociales significa compartir el momento, pero ahí es donde acaba nuestro altruismo. Y es que no podemos hacer que otros vivan ese instante, simplemente podemos decirle al mundo que estamos en ese lugar en ese determinado momento.


  El problema es que ha llegado el punto en que nos importa más propagar nuestra vida a los cuatro vientos que disfrutar de ella con los cinco sentidos. Piénsalo, ¿para qué sacamos la cámara? ¿Para conservar nosotros, de alguna manera, ese momento o para que a otros le guste la foto?

  

  No lo voy a negar, también es divertido poner un filtro por aquí y un hashtag por allá, pero no hay que olvidar que el mundo real nos ofrece sensaciones que son muy difíciles de capturar con un objetivo.

......